Panamá, 14 de marzo de 2024. Personal de la Dirección de Desarrollo Social del Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (Miviot) realiza una labor de verificación y actualización de las familias que serán beneficiadas con el proyecto residencial Nuevo Cartí, en la comarca Guna Yala.
Un cuerpo de trabajadoras sociales de la sede principal, apoyadas de las regionales de Chepo y Las Mañanitas, se trasladó a la isla Gardí Sugdub, para verificar casa por casa, a cada uno de los beneficiarios que ocuparán una vivienda de la obra habitacional en tierra firme, licitada y dirigida por la Dirección de Ingeniería y Arquitectura de la entidad.
María Castillo, jefa del Departamento de Trabajo Social, quien participaba en la gira en el Archipiélago de San Blas, explicó que se está verificando en sitio el cuadro familiar de las 300 familias, una labor rigurosa y que cuenta con el apoyo de las autoridades comarcales.
Detalló que desde el pasado lunes nueve trabajadoras sociales se dividieron el grupo de 89 familias restantes que faltaban por evaluaciones sociales para acceder a las viviendas, lo que han logrado coordinadamente atender.
Castillo contó que para agilizar el trabajo social se solicitó a la comisión de vivienda de la comunidad que les asignaran un intérprete, que permita la fluidez del conversatorio entre las colaboradoras del Miviot y las personas que muchas veces hablan poco español, y así agilizar la confección del informe social.
Una de las familias que espera para mudarse a su nueva casa es la compuesta por Melany Salazar, de 27 años, su cónyuge Johan Herman, de 28 años y sus dos hijos, de 7 y 4 años, quienes actualmente ocupan una morada compuesta de materiales improvisados, típicos en el área comarcal.
“Estamos muy contentos. He visitado la casa, he tenido el gusto de visitar el proyecto. Nos agrada la idea de la nueva casa, un cuarto para los pequeños”, dijo la joven.
El Miviot programa para el mes entrante la entrega de la obra urbanística Nuevo Cartí, compuesta de 300 soluciones, que permitirán reubicar en tierra firme a familias gunas residentes de la isla Gardí Sugdub, afectada por el cambio climático y hacinamiento.
El proyecto, que además incluye en sus perímetros la Casa del Congreso y la Casa de la Chicha, construidas con materiales siguiendo la costumbre y cultura de este pueblo indígena, representa una inversión de 12.2 millones de balboas.