Panamá, 8 de junio de 2020. Ante la resistencia de reubicación, el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (Miviot), mediante sus altas autoridades, volvió a escuchar las inquietudes y plantearles las alternativas a las familias de Villa María, en Panamá Norte, afectadas por un reciente deslizamiento de tierra.
En una segunda reunión de trabajo, esta vez dirigida por el viceministro Rogelio Paredes, se explicó a las familias del cerro en Ernesto Córdoba Campos, las de alto riesgo, que fueron perjudicadas y sus vidas estaban en riego por un deslave, que la entidad estudia tres opciones de terreno para la reubicación, pero deben permanecer en un sitio temporalmente.
Explicó que entre las alternativas hay para entregar a cada familia 300 metros cuadrados de terreno en el Valle de San Francisco, que será titulado a favor de cada beneficiario, para que tengan algo propio y no sigan viviendo en ese asentamiento vulnerable donde nunca tendrán su título de propiedad.
En el entendimiento, el viceministro de Vivienda manifestó que las familias recibieron positivamente la propuesta, aceptaron mudarse al albergue temporal o permanecer por voluntad propia donde familiares mientras se resuelve la contingencia.
“Esa es una opción. El Miviot no ha abandonado a Villa María, la entidad ha estado pendiente y aquí tenemos un equipo de trabajo desde el primer día y la tolda con jefes y funcionarios permanentemente hasta que esto se resuelva”, enfatizó.
Paredes acudió a Villa María designado por la ministra Inés Samudio, quien sostuvo un encuentro con los afectados el mismo martes que ocurrió el deslave y llevó al desalojo inicial de 13 viviendas, que el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) advirtió que no pueden ser ocupadas.
Las evaluaciones y captaciones del Departamento de Trabajo Social del Miviot y las inspecciones del Sinaproc han arrojado hasta el momento una familia más, de las incluidas de alto riesgo, que suman 15 y que el desalojo es inmediato.
La Dirección de Desarrollo Social ya tiene captada a esta última familia que este jueves se sumó a las otras 14, que no estaba contemplada desde el deslizamiento, pero que el Sinaproc entró al área y determinó que la señora necesita la ayuda y hay que desalojarla del área de peligro.
Para Paredes, el momento actual de pocos recursos y el Coronavirus impiden hacer mucho más y a mayor velocidad. “Estamos trabajando dentro de las circunstancias, con los recursos que podemos y tratando de resolver el problema de Villa María de la mejor manera”, acotó.
El Miviot alega que hay una necesidad urgente y reconoce que nadie quiere que le derrumben lo poco que construyó, por lo que analiza tres opciones de terreno que se pueden habilitar para ir trasladando a las familias (tres están alojadas en un hotel), pero antes deben permanecer en algún lugar con familiares o el albergue temporal.